Un duro momento enfrentan los niños venezolanos

Debido a la crisis migratoria, los niños venezolanos viven un duro momento de sus vidas, se puede decir que estos, junto a los ancianos, son los más golpeados. Pues ellos en su mayoría son dejados atrás por sus padres que van en busca de una mejor vida y un empleo digno para poder sustentarse. Y se ven obligados a dejarlos al cuidado de familiares.

Es otro gran problema que engruesa la crisis en Venezuela, pues para nadie es un secreto que de cada cinco migrantes venezolanos 1 deja al cuidado de otros familiares a sus hijos. Las encuestas apuntan que por cada 10 familias, 9 tienen familiares que han emigrado. Y en su mayoría tienen hijos.

Muchos prefieren dejarlos ante un incierto destino

No serán todos los olvidados, pero sin son bastante los dejados atrás. Pues los padres de familia, se lanzan a un destino incierto en búsqueda de oportunidades a otros países. Para nadie es un secreto que muchos llegan a refugios establecidos, algunos por organizaciones mundiales y otros los han establecido privados sin fines de lucro. Se han asentado para albergar la diáspora venezolana, que huye de un país donde están muriendo de hambre. Así lo manifiestan al ser entrevistados.

Son muchas las personalidades y periodistas de la vida pública que se han allegado a las fronteras y han visto el panorama de los venezolanos que han decidido emigrar con sus hijos, durmiendo con ellos en la calle y comiendo de las dádivas. El caso contrario de los que deciden dejar a sus hijos al cuidado de otro, escala una cifra de al menos 980.000 que permanecen en Venezuela mientras sus padres trabajan en otros países. Esta es la preocupación de Cecodap  la cual es la «organización defensora de los derechos de los niños venezolana».

Otros factores que perjudican a los infantes

Todos esos padres que se fueron a trabajar para mantener a sus hijos y a sus progenitores desde afuera. Más tarde enfrentarán a hijos con algunos problemas de desprendimiento afectivo hacia ellos. Y quizás de otras índoles psicosociales por no tener la figura paterna o materna a su lado. Muchos especialistas en el área de psicología o sociología, conducta humana y desarrollo de personalidad. Apuntan a que quizás no les falte comida a los pequeños, pero si le hará falta el contacto físico y los cuidados primordiales que los padres tienen el deber de ofrendar a sus hijos.

Lo más alarmante es que esta situación se ha incrementado en el inicio de este año 2020, pues la migración no deja de fluir. Se cree que la cifra ya podría estar alcanzando los 5.5 millones a mediados de este año. Un problema sin duda para la región de toda América que conforman los destinos más cercanos. Para nadie es un secreto todo lo que esto ha arrastrado en los últimos años. Por otro lado y aunado a las implicaciones psicológicas, existen además, otras implicaciones de carácter legal, pues jurídicamente los niños de aquí y de allá tienen problemas para brindarles educación legal y legítima, también a la atención médica y a permisos de viajes. Generalmente viajan con uno solo de sus padres y se requieren las firmas de los dos para cualquier proceso legal.

Leer.- Un buen equipo de asesoría fiscal, es necesario para blindar cualquier economía, bien sea de negocios o familiar.

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